positivo:
El personal es muy amable y se preocupa porque disfrutes tanto de tu estancia como de tu visita a la ciudad. Te explican muy bien todo lo relacionado al transporte público, los lugares importantes y también te recomiendan lugares para comprar a buen precio (es decir, que te evitan caer en las famosas tourist traps). El lugar está bien ubicado y cuenta con acceso al transporte público a pocos metros, además muy cerca está un restaurante-bar muy ameno donde sirven comida húngara de primera a un precio más que bueno. Las habitaciones son cómodas, cálidas (esto es muy importante en invierno), con todos los servicios y tienen una recepción del wifi inmejorable, además que este último servicio es completamente gratuito. Hay cajas de seguridad en todos los cuartos, principalmente para guardar celulares, pasaportes, joyas o dinero; si quieres guardar tu laptop o algo más grande, necesitas llevarlo a la recepción. El precio por tres noches me pareció estupendo y la verdad, es un hotel que no te decepciona.
negativo:
Pocas son las cosas negativas, pero las hay: el agua caliente en el baño a veces estaba a pocos grados antes de considerarse helada, es decir, en ocasiones no había agua caliente (de nuevo, en invierno esto es indispensable). Desafortunadamente, cuando sí había agua caliente, estaba sucia (salía amarilla). Llamé a la recepción y dijeron que prestarían más atención a eso. Otro aspecto poco favorable es que el restaurante solo sirve desayuno, esto puede ser incómodo si quieres llegar a cenar o recibir servicio a la habitación.