Sibiu es la capital del distrito de Sibiu, en Rumanía. Es un importante centro económico y cultural de Transilvania, y entre 1692 y 1791 fue la capital del Principado de Transilvania. Fue fundada por colonos sajones en el siglo XII y hasta antes de la Segunda Guerra Mundial era la ciudad más importante para la minoría alemana de Rumanía; en consecuencia, parte de su arquitectura es germánica.
Sibiu es un importante nudo ferroviario de Rumanía; además, por la ciudad pasan el río Cibin y carreteras nacionales e internacionales. Por otra parte, la proximidad de la ciudad a las Montañas Fagaras la convierte en un destino apreciado para las vacaciones de invierno como el esquí o el trekking. El complejo turístico invernal de Paltinis se encuentra a 37 kilómetros de distancia.
La zona geográfica de Sibiu es una de las regiones más visitadas de Rumanía. Sus barrios históricos son de lo mejor preservados del país y muchas de sus fortificaciones medievales han sido mantenidas en excelente estado.
En 2004 el casco antiguo de la ciudad ha entrado a formar parte del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Se compone de dos entidades diferentes: la Ciudad Alta y la Ciudad Baja. La Ciudad Alta era la zona más rica y el lugar donde se localizaban los comercios, mientras que la Ciudad Baja era mayoritariamente industrial. Una visita exhaustiva de Sibiu incluye la Plaza Grande con el Palacio Brukenthal, uno de los más importantes de los monumentos barrocos de Rumanía (esquina noroeste de esta plaza), la Torre del Consejo, la Plaza Pequeña con el Puente del Mentiroso y el pintoresco Callejón de las Escaleras, que descendiendo a lo largo de las fortificaciones por debajo de sus arcadas, une la Ciudad Alta con la Baja.
A lo largo del año 2007, Sibiu ha sido (junto con Luxemburgo) Capital Europea de la Cultura. Ha sido el evento cultural más importante que haya tenido lugar en la ciudad y esto ha atraído un gran número de turistas.